¿Imagina almorzar unos deliciosos tallarines con pesto morado o rellenar zapallos italianos de colores? Giovanna Yampara Calle sueña eso y mucho más como resultado de su proyecto de huerta educativa...
¿Imagina almorzar unos deliciosos tallarines con pesto morado o rellenar zapallos italianos de colores? Giovanna Yampara Calle sueña eso y mucho más como resultado de su proyecto de huerta educativa ubicada en el kilómetro 13 del valle de Azapa, Arica, al cual fue visitado por el SEREMI de Agricultura de la región; Jorge Heiden.
Giovanna es una joven estudiante de Ingeniería Agrícola de la Universidad Santo Tomás que sigue al SEREMI en redes sociales y se animó a invitarlo a conocer su proyecto nacido en plena cuarentena tanto con el fin de producir sus propios alimentos inocuos como de realizar una labor educativa en cuanto al trabajo que realizan día a día los agricultores de Azapa para llevar alimentos a las mesas de todo Chile.
Teniendo hijas menores de edad y una madre que cuidar, Giovanna comenzó con el sistema de tele trabajo y relata que “lo vi cómo una oportunidad para llevar a cabo mi sueño de educar a mis hijas respecto de la producción de alimentos sin pesticidas ni químicos y dar a conocer a la comunidad, en general, que sí se puede tener una pequeña huerta, aunque sea en un espacio de 2 metros cuadrados”.
Al respecto el SEREMI Heiden destaca cómo frente a una situación tan compleja como la crisis sanitaria, surgen proyectos orientados al bien común, a la producción de alimentos inocuos y de nuevas especies en el valle.
Un sueño, trabajo colaborativo y reciclaje
El terreno de 7 x 10 metros cuadrados “era pura piedra”, pero esta azapeña comenzó a limpiarlo con sus propias manos, un vecino le ayudó con un tractor, se consiguió las herramientas y se fue asesorando con sus vecinos agricultores. Luego que la tierra estuvo arada, se consiguió cinta, compró conectores y semillas.
Giovanna relata que las bandejas para germinación las encontró en el río, junto con su hija “la gente bota mucha basura al río y son elementos que sí se pueden usar, como es el caso de estas almacigueras, que solo tenían un par de espacios malos”.
Actualmente está empezando a cultivar variedades no muy conocidas de alimentos que consumimos frecuentemente, como la albahaca morada y espinacas de colores “y vamos llevando un registro con mi hija mayor de tiempos de germinación y cómo se comportan las especies”.
Por último, esta joven explica que “la idea es que puedan venir jardines infantiles y estudiantes en general a vivir la experiencia de cómo se saca la maleza, se germina, se cosecha, se riega y se trasplanta”.
