Agregar valor, disminuir la huella ecológica y ambiental de la producción y diversificar la matriz agroalimentaria, son algunas de las metas que nos dio a conocer Rodrigo Morales, coordinador nacional de Ganadería del INIA.

Rodrigo Morales, médico veterinario, Doctor en Calidad Agroalimentaria e investigador, lleva cerca de 15 años estudiando la calidad de la carne y otros alimentos producidos en condiciones de pastoreo en Chile.

Sus trabajos científicos han permitido comprobar que las carnes –al igual que los lácteos- que se producen en la zona sur, aportan nutrientes esenciales, entre ellos proteínas de alto valor biológico, minerales, vitaminas y además poseen características particulares más saludables por su contenido de ácidos grasos como el ácido linoleico conjugado (CLA por sus siglas en inglés) y su mejor relación omega3-omega6 que son beneficiosos para la salud humana.

Actualmente, Morales ejerce el cargo de coordinador nacional de Ganadería del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) y en esa condición conversamos con él para conocer detalles de los trabajos que está desarrollando el INIA y cómo proyecta su labor en el futuro.

¿Cuáles son los principales desafíos de la ganadería especialmente en el sur de nuestro país?

El subdirector nacional de I+D+i de INIA, Christian Alfaro, en su reciente visita a la Región de Los Lagos, dio a conocer algunos desafíos a mediano y largo plazo que son parte de nuestra misión institucional, entre ellos, disminuir la huella ecológica y ambiental de la producción agropecuaria, conservar y aumentar la biodiversidad productiva y diversificar la matriz agroalimentaria.

¿Cómo se aplica esto a la ganadería?

En el área de Ganadería, nosotros estamos desarrollando trabajos de investigación y transferencia tecnológica, encaminados hacia una producción sustentable y sostenible, queremos desarrollar una ganadería resiliente, adaptada al cambio climático, promover la ganadería regenerativa y el uso de bioinsumos para disminuir el uso de agroquímicos.

Buscamos agregar valor a la carne y lácteos producidos en pastoreo con la menor huella de carbono y agua. Además, estamos enfocados en valorizar los productos pecuarios como fuente de proteínas y nutrientes de alto valor y como recursos estratégicos para la soberanía y seguridad alimentaria de nuestro país.

¿Esto tiene que ver con los sellos de certificación?

Efectivamente, junto con el estudio y la caracterización de los alimentos, hemos trabajado en los sellos de origen. En primer lugar, en indicaciones geográficas como el Cordero Chilote I.G., la única Indicación Geográfica animal de Chile y además, hemos generado los antecedentes técnicos para la presentación ante el Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INAPI) de marcas de certificación y colectivas como los sellos OvejaK, para la carne ovina y productos ovinos del territorio Künko en las Provincias de Osorno y Llanquihue; y Pelluchilwe, para el cordero y productos ovinos del archipiélago de Chiloé, que ya fueron aprobadas y se encuentran en uso por parte de los productores. Adicionalmente, el sello VQP, para productos lácteos de Vacas que Pastorean, que se encuentra en su etapa final de aprobación y el sello CLP para las Carnes de Libre Pastoreo.

Finalmente, desarrollamos la marca comercial Buen Artesano que utilizaremos con un nuevo Grupo de Extensión Tecnológica en quesos de autor con recetas innovadoras y productos de alta gama generados por pequeñas y medianas empresas y emprendedores queseros, destinados a un mercado gourmet, tanto nacional como de exportación, lo que también apunta a la diversificación de la oferta productiva.

En este mismo aspecto y pensando en sellos que den garantías a los consumidores en los nuevos tiempos, estamos empeñados también en hacer un aporte significativo en materia de bienestar animal, tanto en investigación como en sistemas de producción, que permitan generar nuevos protocolos y avanzar aún más en este sentido.

Entre los desafíos, habló también de la conservación y aumento de la biodiversidad productiva, ¿nos puede decir algo de eso?

Claro, en el ámbito de la conservación del patrimonio estamos trabajando con razas autóctonas y Programas de Mejoramiento Genético, entre ellos un núcleo genético de ganado de la raza Aberdeen Angus en INIA La Pampa en la zona de Osorno y criaderos de cordero Chilote y de la raza ovina Hidango, en Chiloé y la zona del Maule, respectivamente, entre muchas otras iniciativas.