La SEREMI de Agricultura y especialistas de INIA Remehue, realizaron capacitaciones en fertilización de praderas y estrategias para enfrentar los efectos del cambio climático en la región de los Lagos.
El proyecto es financiado por el Gobierno Regional de Los Lagos y ejecutado por la SEREMI de Agricultura e INIA Remehue, el cual busca beneficiar a pequeños y medianos agricultores de la región
En el marco del proyecto FNDR “Programa capacitación para mejorar la fertilización integral de praderas de la región de Los Lagos”, liderado por la SEREMI de Agricultura, especialistas de INIA Remehue realizaron capacitaciones en fertilización de praderas y estrategias para enfrentar los efectos del cambio climático en la región, destinadas a profesionales y técnicos operadores de las provincias de Chiloé y Llanquihue.
Este proyecto es financiado por el Gobierno Regional de Los Lagos y ejecutado por la SEREMI de Agricultura e INIA Remehue y busca beneficiar a pequeños y medianos agricultores de la región con la bonificación de fertilización y siembra de praderas mejor adaptadas a las condiciones de verano con bajas precipitaciones.
El Seremi de Agricultura (s) Mario Castro señaló que “en un contexto de cambio climático, nuestro trabajo como Ministerio de Agricultura busca anticiparse y, a través de un trabajo colaborativo, entregar soluciones tecnológicas que ayuden a los agricultores a adaptarse mejor a las nuevas condiciones. La generación de praderas de calidad tiene un impacto directo en la actividad pecuaria regional, por eso hemos destinado esfuerzos importantes en capacitación asociada a materias de fertilización y recuperación de suelos”.
Ingrid Martínez, especialista en suelos de INIA Remehue, indicó que “uno de los propósitos del taller fue entregar herramientas metodológicas a los asesores sobre las prácticas bonificables, que pretende reducir al 5% la saturación de aluminio de suelos bajo pradera en la región. El propósito de la fertilización integral es alcanzar sistemas pastoriles más sustentables y productivos, considerando no sólo nutrientes importantes como el fósforo y el potasio, sino el azufre que es un macronutriente secundario cuya deficiencia afecta principalmente la cantidad proteica y el rendimiento de las praderas”.
La Dra. Martínez “valoró que los asistentes aportaran con sus experiencias sobre el programa, lo que permitió una discusión más enriquecedora”.
En tanto, Alfredo Torres, especialista en praderas y cultivos de INIA Remehue, entregó una serie de recomendaciones para enfrentar eventos climáticos adversos en la ganadería.
En su presentación, Torres explicó que “una de las tecnologías de mayor impacto para enfrentar efectos adversos en la producción forrajera, tanto bióticos como abióticos, es la fertilización de praderas, que nos permite obtener una mayor cantidad de forraje a bajo costo”.
Añadió que “en los meses de junio y julio debemos planificar los periodos críticos del próximo año, no solo el invierno, sino que también el verano. Recordemos que, producto del cambio climático, en los últimos 10 años, hemos tenido veranos secos en 8 ocasiones, por lo tanto, se debe contemplar forraje conservado, ensilaje y fardos, también para el verano, junto con sembrar cultivos suplementarios como la alfalfa, raps forrajero, chicoria y siete venas entre otros. Por otra parte, indicó, que para las siembras de praderas permanentes existen alternativas a la ballica perenne, como el festulolium, la festuca, pasto ovillo y bromo, las cuales producen entre un 50% y un 133% más que ballica en los meses de verano”.
Esta actividad organizada por la profesional de la Seremía de Agricultura de la Región de Los Lagos, Denisse Endress, se realizó en las ciudades de Ancud y Los Muermos.
