La fruta que se recibe en este lugar proviene de las regiones desde el Maule hasta Los Ríos, razón por la cual su actividad aumenta en esta fecha y hasta...

La fruta que se recibe en este lugar proviene de las regiones desde el Maule hasta Los Ríos, razón por la cual su actividad aumenta en esta fecha y hasta el término de la temporada (Mundo Agropecuario).

Con la presencia del Director Nacional del SAG, Horacio Bórquez, abrió sus puertas para la temporada 2018 – 2019 el sitio de Inspección Fitosanitaria de Teno, el cual presta servicios de certificación de productos hortofrutícolas con destino al mercado norteamericano.

En este lugar se realizan inspecciones conjuntas entre funcionarios SAG y personal del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) a fruta fresca como cerezas, arándanos, manzanas, entre otras especies, que luego se exportan a esa nación. La fruta que se recibe en este lugar proviene de las regiones desde el Maule hasta Los Ríos, razón por la cual su actividad aumenta en esta fecha y hasta el término de la temporada.

Durante el periodo 2017–2018, las inspecciones SAG/USDA realizadas en el Sitio Teno alcanzaron las 6,4 millones de cajas.

Al respecto, el Director Nacional del SAG, Horacio Bórquez, destacó que “este sitio tiene la capacidad de generar la mayor confianza a quien recibe nuestra fruta, que nuestra certificación está bien hecha y que lo que comprometemos con los países de destino, en este caso Estados Unidos, tiene la seguridad de que se cumple”.

Por su parte la Asociación de Exportadores de Chile (ASOEX), presente en la actividad a través del administrador del sitio, Juan Contreras, explicó que “el trabajo que aquí se realiza tiene por objetivo asegurar a las exportadoras y plantas que el servicio que aquí se realiza sea lo más adecuado y acorde, que pueda fluir en forma continua y sin aumentar los riesgos de una posible anomalía”.

Cabe destacar que en estas instalaciones, bajo estrictas condiciones de resguardo, se procede a revisar la fruta bajo la normativa norteamericana. Una vez que es aprobada la inspección fitosanitaria, los productos quedan en condiciones de ingresar directamente a Estados Unidos, puesto que esta inspección forma parte de un programa de pre embarque, lo que significa que la fruta no es revisada nuevamente en destino.

Todos los envíos de productos vegetales de exportación deben cumplir con los requisitos fitosanitarios establecidos por los países de destino. Actualmente el SAG, en sus instalaciones en Teno, proporciona servicios a 140 empresas exportadoras del país.

En relación a las expectativas para la presente temporada, el Jefe de la División de Protección Agrícola y Forestal del SAG, Rodrigo Astete, señaló que “creo que esta temporada va a ser bastante promisoria para los productores y exportadores; sin duda ha sido interesante el trabajo que hemos hecho de apertura de nuevos mercados y estamos muy bien preparados como Servicio para la temporada que comienza. En particular, estamos revisando algunas cifras en el sitio de inspección y se ve todo muy normal en cuanto a los volúmenes que están partiendo, así que prevemos que va a ser una muy buena temporada con excelentes números para nuestros productores y exportadores”.

Este sitio de inspección cuenta 10 mesas para revisión e inspección de muestras y 40 funcionarios operando. De ellos, 15 pertenecen al Servicio Agrícola y Ganadero y 25 a ASOEX (Asociación de Exportadores de Frutas de Chile). Además hay un laboratorio de entomología con avanzada tecnología, el cual cuenta hoy con análisis biomolecular para la detección de plagas.

Tecnología de punta

El SAG, en conjunto con ASOEX, visualizó la necesidad de dotar al sitio de una herramienta de última generación para la determinación rápida -a través de la técnica de análisis molecular (PCR)- de la especie “chanchito blanco”, que constituye una de las principales causales de rechazo en fruta para el mercado de Estados Unidos.

Esta técnica permite la determinación de la especie pseudococcus (chanchitos blancos) a través de huevos o partes del insecto en estado inmaduro que se encuentren presentes en la fruta, evitando así rechazos de lotes en los cuales no se podía determinar fehacientemente la especie. Esto facilita enormemente el proceso de inspección fitosanitaria al mejorar el flujo de revisión de la fruta, elevar el nivel tecnológico y hacer más competitivo el proceso de certificación fitosanitaria, permitiendo llegar al mercado norteamericano con la seguridad que este requiere.

El SAG de la región del Maule, a través de sus profesionales y técnicos, ha liderado la validación e implementación de esta técnica participando activamente en el desarrollo de ensayos y análisis de datos en conjunto con otros laboratorios de referencia, lo que permitió finalmente obtener la implementación en esta región del primer laboratorio de biología molecular para la determinación de esta especie.